De forma online y con gran participación finalizó la Escuela Tecnológica de Verano
En esta ocasión, se entregaron becas para participar de la Escuela Tecnológica a 8 niños y niñas de los Colegios Hospitalarios de la Fundación Nuestros Hijos y a 3 más de la Unidad Maxilofacial del Hospital Luis Calvo Mackenna.
Tras un intenso mes de aprendizajes y nuevas experiencias en las área de la ciencias y la ingeniería, terminó la Escuela Tecnológica de Verano que organiza el Fablab IDI, impulsado por el área de Diseño de la Escuela de Ingeniería UC.
Desde el 11 hasta el 29 de enero, alrededor de 119 jóvenes de 11 a 16 años participaron en distintos talleres enfocados en el prototipado colaborativo y en el potenciamiento de sus propias habilidades donde pudieron experimentar con el diseño, la construcción e interacción con la ciencia y la tecnología, además de establecer nuevas amistades.
A diferencia de otros años y con el fin de resguardar la salud de todos los participantes, la Escuela Tecnológica se desarrolló de manera virtual, lo que permitió la participación de jóvenes de distintas regiones del país como Chonchi, Copiapó, San Pedro de la Paz, Iquique, Vallenar, Calama, Litueche, Viña del Mar, entre otros.
Con un nuevo enfoque metodológico adaptado al modo online, los niños y niñas recibieron un Kit de materiales en sus respectivos domicilios el cual contiene todos los elementos necesarios para construir distintos artefactos durante las clases que impartieron los monitores encargados, poniendo a prueba principios hidráulicos, mecánicos, eléctricos y de programación, haciendo que los niños puedan aprender de ciencia y tecnología, de forma didáctica y entretenida.
Además, en esta 5ta versión de la Escuela, se entregaron 8 becas a niños y niñas de la Fundación Nuestros Hijos y 3 más a la Unidad Maxilofacial del Hospital Luis Calvo Mackenna. Así es como con el fin de no poner en riesgo a ningún jóven, en términos de producción, los kits se armaron con más de dos semanas de anticipación para que los elementos alcanzaran a perder una hipotética carga viral.
Estefanía Malaver, alumna de uno de los Colegios Hospitalarios de la Fundación Nuestros Hijos y participante de la Escuela, destacó el dinamismo de las actividades y que estas estuvieran pensadas para todas las edades sin distinción. “Pero el que más me encantó fue el robot a control remoto, me gustó porque pude demostrarme a mí misma que podía lograrlo, aunque me parecía muy complicado, pero al final lo logré y por eso me gustó este proyecto en conjunto con el taller de verano”, dijo.