Primeros puntajes en Ingeniería UC

Tres de los primeros cuatro puntajes, en conversaciones sueltas, muestran la característica esperada de habilidad matemática, pero cada cual es una individualidad y un futuro abierto de opciones y responsabilidades....

Primeros puntajes en Ingeniería UC

Santiago Lira Ihnen, número 1 en entrar a primer año de Ingeniería UC, optó a último instante entre ingeniería y medicina. Está consciente, también, de que ingeniería le permite articular con medicina. Graduado del San Ignacio de El Bosque, toca batería, aunque ya no tiene su grupo. Vino con su madre que habla de la responsabilidad del talento. Santiago se siente muy consciente de la proyección de la carrera, de su impacto en la sociedad. Le molesta que lo celebren por ingresar con el primer puntaje. No le gustan las cámaras.

Andrés Banura Schultz, (en la foto) de 1 m 93, el número 4, se inclina por el rugby y el fútbol. Sus padres son médicos, pero él se encantó siempre con la matemática. Sin embargo, no quería una carrera académica matemática, así es que ingeniería era la vía clara. Advertido de que en la Escuela se le abren muchas posibilidades y de su responsabilidad de elegir, responde “prefiero esa responsabilidad”. Viene del Santiago College, ha trabajado Cálculo, pero quiere comenzar desde un principio. Fue puntaje nacional, como 63 otros novatos que ingresaron a la carrera

Tamara Covacevich Stipicich, la número 2, se multiplica. Ha practicado “todos” los deportes, pero su pasión son el básketbol y el ajedrez. Escogió ingeniería (flexible, aquí tengo tiempo para decidirme).  “¡Me gustaría que me gustara algo específico porque disparo para tantos lados!” Desde chica fue matemática: entró a primero básico sabiendo multiplicar, gracias a una hermana matea. En los últimos años, una profesora la desafiaba “igual se fue del colegio, iba a un ritmo muy rápido, que a mí me encantaba”. Le gusta hacer negocios, jugar en la Bolsa, no quiere programar, solo usar computadores, le gusta bailar música latina pero escuchar música en inglés, música antigua, country,  “música de mi papá”.  Estudió en el British School, en P. Arenas. Trabajó los veranos en Torres del Paine. Pasó un año en Minnesota, de intercambio.  Dice: “sé que la mayoría de mis compañeros va a venir de barrios altos, acá se nota mucho más que en P. Arenas; allá voy a un colegio privado pero estoy en la misma ciudad con todos, hay un centro, no podemos separarnos… me encantaría abrirles los ojos a algunos de mis compañeros, participar, gestionar algunas iniciativas… vamos a ver cómo me va” .