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Gironás, J. y Fernández, B. (2011). Relación entre agua y ciudad. 2a Jornada Técnica Espacio Público Sustentable 2011, Espacio Público – Planificación y Eficiencia en el Consumo de Recursos (Agua), Santiago, 18 Agosto. (2011)

Relación entre agua y ciudad

Tipo de publicación : Conferencia No A* ni A

Abstract

El agua es un elemento esencial para el planeta ya que juega un rol fundamental en la regulación del clima, la evolución del relieve y el desarrollo de la vida animal y vegetal. Adicionalmente es un recurso natural renovable utilizado en un sinfín de actividades humanas, siendo vital el adecuado acceso a ella para el desarrollo de sociedades íntegras, equitativas y saludables. La interacción de este elemento con el ambiente y el ser humano ocurre en todas las etapas del ciclo hidrológico, el cual involucra una serie de procesos físicos que determinan la circulación y la variabilidad espacial y temporal del agua en la atmósfera, los océanos, la superficie terrestre y el subsuelo.La cuenca corresponde a la unidad espacial fundamental donde ocurren estos procesos, controlándose en forma natural el comportamiento del agua, su movimiento y su calidad. Todos vivimos en una cuenca, y por lo tanto, todos participamos de una serie de modificaciones que sufre el paisaje, los procesos del ciclo hidrológico y la calidad del agua. Sin lugar a dudas las ciudades son las obras del hombre de mayor impacto en las cuencas. Las prácticas tradicionales de diseño, construcción y operación de sistemas hidráulicos urbanos han llevado a las ciudades de Chile a la situación actual, donde por un lado hay una cobertura casi total de agua potable y alcantarillado, pero por otra parte es reciente el esfuerzo en lo referido al tratamiento de las aguas residuales, y aún más incipiente el manejo de la escorrentía urbana, la conservación del medioambiente, y la integración de la ciudad, el paisaje y el agua. La carencia de una planificación urbana en la que se busque replicar el balance hídrico natural y conservar la red de drenaje natural, ha significado el desarrollo de una ciudad no sustentable, donde la infraestructura del agua se ha vuelto obsoleta, no incorpora el paisaje natural y no se relaciona con las actividades humanas de la ciudad. Actualmente hay una creciente preocupación en el mundo por alcanzar urbanizaciones sustentables, donde el agua es considerada como un recurso dentro de la ciudad. Esto ha permitido desarrollar con éxito una serie de herramientas técnicas y políticas de gestión orientadas a minimizar los efectos negativos de la urbanización y acercar el recurso hídrico a la población y sus actividades.