Historia
Los logros alcanzados por el DIQB a lo largo de su historia se fundamentan en su excelencia y compromiso con el desarrollo integral del país que se ve reflejada en sus programas de estudio e investigación.
Uno de los primeros antecedentes sobre el desarrollo de la Ingeniería Química en la Universidad Católica de Chile está vinculado a la reforma del Plan de Estudios de 1915 que estipuló que el curso de Química debía tener carácter de ciencia aplicada especialmente a la Ingeniería.
Más tarde, en 1928 una nueva reforma al Plan de Estudios implicó un cambio de estructura que fue decisivo en la formación por parte de la Escuela de Ingeniería de profesionales prácticos capaces de promover el desarrollo integral del país y que consistió en la creación de Departamentos, entre ellos el Departamento de Ingeniería Química, que agrupaban cátedras afines con el propósito de ofrecer enseñanza teórica y práctica.
Más de dos décadas más tarde en 1950 nació el programa de Ingeniería Industrial con mención en Química, cuyo propósito fue responder al desafío que representaba la industrialización del país. El programa estaba orientado a formar ingenieros civiles capaces de proyectar, instalar y mantener cualquier tipo de industria o proceso químico.
Impulso al crecimiento
La década de los años 1960 tuvo como protagonista del crecimiento de la Escuela de Ingeniería al profesor Jaime Wisniak, Ingeniero Químico de la Universidad Católica y Doctor of Philosophy de Purdue University, quien ideó junto al decano Raúl Devés el considerado primer Gran Plan de Desarrollo de la Escuela, el cual incluía profundos cambios en la formación de los estudiantes, un aumento substancial del número de académicos, y mejoras significativas a la infraestructura docente y de investigación.
Para la implementación del ambicioso Plan el profesor Wisniak y el decano Devés consiguieron los aportes de la Fundación Ford y el Banco Interamericano de Desarrollo que se tradujeron en la construcción en 1965 de una nueva Escuela de Ingeniería en el campus San Joaquín y el subsecuente crecimiento en el número de estudiantes y graduados.
Desde aquellos tiempos fundacionales hasta nuestros días el área ha continuado aportando de manera significativa al progreso de la Escuela de Ingeniería. Junto con destacarse por los altos estándares de su docencia e investigación, varios de los académicos del área han desempeñado roles importantes en la Dirección de Investigación de Postgrado y como Vicedecanos.
Ingeniería Química y Bioprocesos
Cuando el Departamento de Ingeniería Química y Bioprocesos (DIQB) se establece formalmente el cambio de nombre reflejó de mejor manera el quehacer de la unidad, cuya parte importante de su investigación se desarrollaba en las áreas de alimentos y biotecnología, donde destacan por su contribución los profesores José Miguel Aguilera y Eduardo Agosín, respectivamente.
En torno al mayor desarrollo de estas áreas comenzaron a gestarse a nivel de pregrado, las especialidades de Ingeniería Civil de Biotecnología y de Ingeniería Civil de Industrias con Diploma en Ingeniería de Bioprocesos. A nivel de postgrado, el Magíster en Ciencias de la Ingeniería, Área Ingeniería Química y Bioprocesos fue creado en 1983 y el Doctorado en Ciencias de la Ingeniería, Área Ingeniería Química y Bioprocesos en 1993.
Actualmente el DIQB cuenta con 18 académicos, quienes destacan por el alto impacto de sus publicaciones y proyectos de investigación, 15 modernos laboratorios equipados con tecnología única en Latinoamérica y avanza en la formación de un nuevo Magíster Profesional en Innovación en Alimentos.